EL FEMINISMO ES EL PLAN DE LA BURGUESÍA FINANCIERA PARA LA ESCLAVIZACIÓN DEL RESTO DE LA HUMANIDAD.

EL FEMINISMO ES PARTE FUNDAMENTAL DEL PLAN DE LA BURGUESÍA FINANCIERA PARA LA ESCLAVIZACIÓN DEFINITIVA DEL RESTO DE LA HUMANIDAD.

domingo, 15 de agosto de 2010

LA VIOLENCIA DE LAS MUJERES CONTRA LOS HOMBRES

Entre el noreste de Uganda y el sur de Sudán, habitan los bkarimoyón, turkana y toposa,  tríbus muy belicosas de pastores seminómadas que se roban los ganados unos a otros, lo que se conoce como razzias. En tiempos pretéritos con lanzas y flechas y, más recientemente, desde la llegada del progreso técnico a África, con fusiles automáticos y lanzagranadas. Debido a esto, las incursiones para aumentar el número de cabezas de vacuno del propio rebaño a costa de esquilmar el del vecino se han convertido en batallas campales  que dejan cientos de muertos sobre el  terreno.

No es que los turkanas, toposas y karimoyones le tengan afición a las razzias de ganado porque sean unos glotones que ansíen hartarse de carne a todas horas, sino porque los hombres jóvenes, si quieren casarse, tienen que aportar un considerable número de vacas al matrimonio.  Cuantas mas vacas posee uno más fácil le resulta convencer a su amada o con más mujeres se puede casar y esto interesa también a las mujeres solteras, más numerosas que los hombres, que no quieren quedarse solteras pero tampoco renuncian a disfrutar de un buen patrimonio. Así que la sociedad aprovecha la riada hormonal de los jóvenes orientándola hacia la violencia con el fin colectivo de adquirir más bienes y satisfacer a las mujeres.

Todo esto nos lo contaba una misionera soriana que lleva entre los karimoyones toda su vida. Al principio responsabilizaba de la violencia a los hombres, lo que indudablemente refleja la realidad. Posteriormente nos explicó las estrategias que había desarrollado para disminuir e incluso evitar la violencia tribal. La hermana, a diferencia de los ideólogos del feminismo, no no intentaba actuar sobre los hombres, ni reprimiéndolos ni concienciándolos para que adoptaran los valores de la no violencia y otros atributos celestiales demagógicamente reservados a las mujeres por el feminismo institucional. Para nuestra sorpresa, para que la violencia disminuyera, la hermana había decidido actuar sobre las mujeres. Según nos explicó, los hombres jóvenes no salen a realizar las razzias si previamente no reciben la bendición, la cual reciben de las mujeres. Por lo tanto la religiosa española lleva años intentando convencer a las jóvenes casaderas y a sus madres para que las jóvenes acepten entrar al matrimonio sin exigir cantidades exageradas de vacas, lo que en occidente sería el equivalente a firmar una hipoteca bancaria king size. 
La sinceridad de la hermana nos dejó claro que la violencia masculina en sus orígenes ancestrales antropológicos, al menos en estas tribus, está bendecida por el colectivo femenino, que es al final el  que verdaderamente se beneficia de ella. No sabemos si esto es inamovible o si existe otra vía de canalizar los instintos antropológicos. Pero por lo que respecta a estas tríbus, bastaría con que las mujeres dejaran de exigir a los hombres que luchen por su bienestar económico para que éstos abandonasen la violencia. No nos viene de nuevo. Se sabe que la codicia de las mujeres ha desatado miles de guerras a lo largo de la historia. En estas guerras los hombres mueren y las mujeres de los enemigos son violentadas, con el beneplácito de las mujeres de los vencedores, el único grupo que no sufre los horrores de la guerra. En las guerras, las mujeres pueden vencer o pueden perder, sin embargo los hombres siempre pierden. Pagan con su existencia  por aquello que ellas más anhelan, el bienestar.

Los publicistas y los expertos en marketing saben perfectamente como funciona la psique humana y la explotan en favor de los intereses de la industria y de la finanza. Las mujeres son en general mejores consumidores que los hombres. En consecuencia, conviene la extensión de los "valores femeninos" a todo el cuerpo social, feminización de los varones y puesta de largo mediática de los gays. Esto ha resultado, gracias al feminismo en la hipócrita criminalización de los varones. Domados, engañados, demonizados, castrados y vilipendiados. Con razón el país más belicoso del planeta es el paradigma de lo políticamente correcto y la patria fundacional del movimiento feminista. Mientras, el ejército de los EEUU se encarga de que a las mujeres norteamericanas no les falte de nada.

1 comentario:

pedrolo dijo...

Me ha gustado el símil entre las vacas y la hipoteca. Uno se da cuenta de que por muy lejanas que sean dos sociedades, en el fondo se parecen más de lo que pensamos y que el mal, lo realmente menospreciable del ser humano, existe en multitud de formas.

Estoy seguro de que a algunas personas les ayudará ver este problema desde una perspectiva distinta y quizá se darán cuenta de lo que hay detrás de la sociedad en la que viven y los valores que en ella les enseñan. Bien es sabido que aquellos que promulgan con la libertad y pluralidad de ideas son los primeros en criticar a sociedades distintas; que pensarán cuando vean que todo aquello que criticaban no era más que el reflejo se si mismos en un espejo.